Invoca la pureza antigua.
Acepta que no puedes
permanecer.
No te arranques
de tu yo,
de tu último anhelo.
Mira a tu planeta suelto
en el oleaje, mira
la piedra del mundo
envuelta en la desmemoria.
Junta a los sabios,
pídeles que pronuncien
los nombres sobre las cunas.
Haz de tus ojos
alguaciles de oro,
observa las palabras
hasta pulverizar la verdad.
Para entrar en la fe
debes ser un retazo
cosido en movimiento,
un lunar en un desierto
de carne fría.
Deja que los frutos
crezcan a la misma hora.
Primero serán detalles,
luego caerán todos juntos:
se abrirán, como limbos,
sobre los azulejos.
2 comentarios:
Saludos cordiales, Gracias por este excelente poema que me cala.
Además...
Invocar al Universo que abra sus puertas par que conectes y entre la información que pides.
Mirar tu interior / exterior para disfrutar y ser benévolo con lo que veas.
Hacer de tu inteligencia un campo de Luz y Amor
Entrar a tu residencia etérea y sincronizarte con con la energía suprema.
Dejarte fluir en estado de gracia y ser libre.
Un abrazo, te leeré más a fondo.
Gracias. Espero estar a la, altura, por intentarlo que no quede.
Publicar un comentario