LA PLAYA

Que mejore el tiempo

para poder disfrutar

días de playa juntos:

Mientras tú intentas

sumergirte en las olas,
yo intentaré inundar

de sal los mares
para untarte con ella

y disfrutar su sabor

en el próximo beso.
Mientras duermas

al sol sobre la arena
yo me entretendré

echándole miradas

de azul al agua
para que no descubras

que incolora va y viene

gastando las escasas

ganas que le quedan

y con el cubo erigiré

castillos en honor

de nuestra hija

mientras le explico

que cuando crezca

no busque príncipes,

sino un buen hombre

que la ame.
Así, mientras sueñas

lejanos horizontes

saltaremos Bahía y yo

sobre las olas
y al volver a tu lado

te protegeremos

de la acción del viento
por si en una de esas

te ves obligada a girarte
y tropieces con mis ojos...

Así sabrás de ese ritual

que la playa despierta

cuando a su erotismo

en ella te abandonas.