Imagen: Momentos posteriores a la firma del acuerdo
Una noticia asombrosa acaba de hacerse pública: Es el final de la crisis económica en España, pues la situación ha dado un giro que nadie esperaba: Los respectivos gobiernos español y chino acaban de firmar el acuerdo mediante el cual el país asiático compra nuestro país.
Dados los términos del referido acuerdo, podemos dar por cerrada la crisis actual y se suspenden las medidas económicas recientemente aprobadas por el gobierno de Zapatero, ya que se mantendrán los sueldos de los funcionarios, habrá un aumento significativo en la cuantía de las pensiones y se crearán miles de nuevos puestos de trabajo que harán disminuir bruscamente las colas del paro. A cambio España pasará a ser una provincia China con estatuto similar a Shangai, se suprimen las Comunidades Autónomas y las corridas de toros se harán con dragones chinos.
‘Es como un cuento de hadas’ ha dicho el dimisionario Presidente Zapatero en la rueda de prensa donde se ha comunicado la firma del acuerdo. El líder de la oposición está desaparecido. Se comenta que ha decidido dejar la política y se encuentra preparando unas oposiciones para entrar en la plantilla del monasterio budista que se instalará próximamente en las instalaciones del Valle de los Caídos. En cuanto al Rey, se acogerá a un Plan de Jubilación Anticipada en el que se le respeta el 80% del salario actual más las correspondientes dietas en especie y será trasladado con toda su familia a Mallorca para dedicarse a actividades relacionadas con el deporte de la vela: Es el último sacrificio que hace por el país.
En sus primeras declaraciones, Zapatero, que ya ha empezado a hablar en chino en la intimidad, se ha mostrado muy satisfecho con la operación: ‘No solo hemos terminado con el problema de la deuda pública, sino que España entra en el futuro por la puerta grande’. Mientras, la oficina china de Relaciones Comerciales ha señalado la gran similitud de ambos pueblos, subrayando las coincidencias físicas de sus gentes ‘pequeños y con cabellos negros’ o de costumbres, como ‘la afición por el arroz, al que llaman paella en España’. También indican que por su especial situación geográfica, la península ibérica se convertirá en la punta de lanza de los planes chinos para introducirse en África.
Unos cuantos chinos, treinta millones según cifras provisionales, llegarán a España en los próximos días para asesorar en la modernización del decadente sector manufacturero y poner en marcha las fábricas de automóviles necesarias para comercializar en Europa los principales modelos automovilísticos de aquél país (los rumores indican que se hará una oferta en firme por la Seat a los alemanes). Otros dos millones de mujeres aguardan para a ser remitidas a España. Forman parte del primer contingente de voluntarias para relanzar la tasa de natalidad en la península, a modo de gigantesca Caravana de Mujeres, título cinematográfico que ha dado la idea.
Este increíble acontecimiento histórico comenzó a fraguarse cuando China se decidió a comprar deuda pública del Reino de España aprovechando su baja cotización y, una vez adquirido el total, la capitalizó convirtiéndose así en el primer accionista del país. Para conmemorar el acontecimiento se están organizado varios festejos en ambos continentes. Los restaurantes chinos de todo el mundo han incluido en los menús la tortilla de papas como plato tradicional de su cocina. Por su parte, el representante español en el próximo festival de Eurovisión cantará en chino cantonés y se deportará al Tibet al espontáneo ese que la montó en el de este año. En las calles de las principales ciudades de la parte asiática de este gran nuevo país están apareciendo como hongos puestos callejeros donde a buen precio pueden adquirirse sombreros cordobeses y vestidos de lunares, prendas que ya se fabrican por menos de un euro la pieza.
Mientras, la Unión Europea todavía no se ha recuperado del shock que ha producido la noticia a nivel internacional. Se han convocado reuniones urgentes en Bruselas y se espera que pasados unos cuantos meses y cuando a nadie le interese ya el tema, la UE haga pública su posición al respecto.
Dados los términos del referido acuerdo, podemos dar por cerrada la crisis actual y se suspenden las medidas económicas recientemente aprobadas por el gobierno de Zapatero, ya que se mantendrán los sueldos de los funcionarios, habrá un aumento significativo en la cuantía de las pensiones y se crearán miles de nuevos puestos de trabajo que harán disminuir bruscamente las colas del paro. A cambio España pasará a ser una provincia China con estatuto similar a Shangai, se suprimen las Comunidades Autónomas y las corridas de toros se harán con dragones chinos.
‘Es como un cuento de hadas’ ha dicho el dimisionario Presidente Zapatero en la rueda de prensa donde se ha comunicado la firma del acuerdo. El líder de la oposición está desaparecido. Se comenta que ha decidido dejar la política y se encuentra preparando unas oposiciones para entrar en la plantilla del monasterio budista que se instalará próximamente en las instalaciones del Valle de los Caídos. En cuanto al Rey, se acogerá a un Plan de Jubilación Anticipada en el que se le respeta el 80% del salario actual más las correspondientes dietas en especie y será trasladado con toda su familia a Mallorca para dedicarse a actividades relacionadas con el deporte de la vela: Es el último sacrificio que hace por el país.
En sus primeras declaraciones, Zapatero, que ya ha empezado a hablar en chino en la intimidad, se ha mostrado muy satisfecho con la operación: ‘No solo hemos terminado con el problema de la deuda pública, sino que España entra en el futuro por la puerta grande’. Mientras, la oficina china de Relaciones Comerciales ha señalado la gran similitud de ambos pueblos, subrayando las coincidencias físicas de sus gentes ‘pequeños y con cabellos negros’ o de costumbres, como ‘la afición por el arroz, al que llaman paella en España’. También indican que por su especial situación geográfica, la península ibérica se convertirá en la punta de lanza de los planes chinos para introducirse en África.
Unos cuantos chinos, treinta millones según cifras provisionales, llegarán a España en los próximos días para asesorar en la modernización del decadente sector manufacturero y poner en marcha las fábricas de automóviles necesarias para comercializar en Europa los principales modelos automovilísticos de aquél país (los rumores indican que se hará una oferta en firme por la Seat a los alemanes). Otros dos millones de mujeres aguardan para a ser remitidas a España. Forman parte del primer contingente de voluntarias para relanzar la tasa de natalidad en la península, a modo de gigantesca Caravana de Mujeres, título cinematográfico que ha dado la idea.
Este increíble acontecimiento histórico comenzó a fraguarse cuando China se decidió a comprar deuda pública del Reino de España aprovechando su baja cotización y, una vez adquirido el total, la capitalizó convirtiéndose así en el primer accionista del país. Para conmemorar el acontecimiento se están organizado varios festejos en ambos continentes. Los restaurantes chinos de todo el mundo han incluido en los menús la tortilla de papas como plato tradicional de su cocina. Por su parte, el representante español en el próximo festival de Eurovisión cantará en chino cantonés y se deportará al Tibet al espontáneo ese que la montó en el de este año. En las calles de las principales ciudades de la parte asiática de este gran nuevo país están apareciendo como hongos puestos callejeros donde a buen precio pueden adquirirse sombreros cordobeses y vestidos de lunares, prendas que ya se fabrican por menos de un euro la pieza.
Mientras, la Unión Europea todavía no se ha recuperado del shock que ha producido la noticia a nivel internacional. Se han convocado reuniones urgentes en Bruselas y se espera que pasados unos cuantos meses y cuando a nadie le interese ya el tema, la UE haga pública su posición al respecto.
2 comentarios:
Más vale ser un siervo glorioso de la China, rico y sin problemas que pariente de la Unión Europea, triste, pobre y convidado de piedra. Si nos vamos a adocenar y peder nuestra idiosincrasia por qué no trufarnos con los chinos?...
Y he visto que todos están contentos:espero que Rajoy se saque las oposiciones y lo veamos con túnica amarilla en el Valle de los caidos...ja ja ja!!!!!crees que cantará el Hare Krisna y silenciará esa lengua???
Lo del Rey no es justo, el 80 por ciento de su sueldo...si fuera mileurista aun!!!...nada...que se vaya a Baqueira, que seguro que están ya haciendo otro templo budista y lo pongan a currar de paleta!!
En cuanto te he leido he ido a apuntarme a un curso de chino.De ahí vengo.
Yo ya tengo claro que este final de la crisis me gusta mucho más que todos los demás proyectos de polítiquillos sin imaginación.
Oye,me he reído con ganas!!!!!y después de matricularme en chino voy a preparar rollitos de primavera para esta noche con pa amb tomaquet y cava catalán para celebrarlo!!
Besos!!
¿Sabes el por qué de la idea para escribir todo esto? Porque reconociendo el tema de la crisis y lo que está suponiendo, algo que me preocupa mucho es que nos está agriando el carácter a todos. ¿No has notado las caras que se ven por la calle, el tono de muchos conversaciones, los gestos que hace la gente? Pues yo quiero seguir siendo capaz de reírme hasta de lo que los demás crean que no es motivo de risa.
A los currantes de a pié la crisis nos va a robar muchos derechos, pero sólo faltaría que se incluyera también el de disfrutar con el buen humor...
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