La primera vez el azar intervino decisivamente, pero luego fueron ellos los que se buscaron con desesperación... La sentencia del Tribunal de los Amores Proscritos les condenó a no acercarse el uno al otro a menos de 50 centímetros... Huyeron juntos hacia la Isla de las Pasiones Desatadas para consumar sus sentimientos en absoluta libertad.
1 comentario:
amo los micro relatos!!!!
(y justo hoy a mi se me agarró la verborragia colectiva extensa... fijate en mi blog)
QUE GANAS DE ESTAR EN ESA ISLA CON MI ANGELADO!!!
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