domingo, 6 de septiembre de 2015

ALREDEDOR DE LA PISCINA





Alrededor de la piscina
el solárium es un centro
ensimismado hasta el origen
succionando rayos de sol
que cae desde su altura infinita,
desde su puro calor hiriente
que traspasa epidermis y licúa
la inicial consistencia de la carne.
En los cuerpos tendidos, la luz
reina entre sus relajadas formas
y confunde espacio y volumen
con las sombras que provoca
su adormecido incendio.
Hay escaso movimiento
en el solárium, sólo
para cambiar las posturas
de descanso sobre la toalla
mientras revolotea como un insecto
entre las curvilíneas figuras
el aire satinado, como el que flota
en un espejo antiguo.
Y de vez en cuando alguien,
se levanta para apagar ardores
y suavizar pieles, pues para ello
está el recurso de la piscina.
Sólo alteran el escenario
los niños, ellos también se doran,
pero pasándolo en grande
sin descansar un momento
en sus regocijos infantiles.




No hay comentarios: