PENSAMIENTOS

Sentarse tranquilo

bajo la sombra de un pino,
respirar con suavidad,

contemplar una mariposa

tendida en los brazos

de la hierba que la rodea,
dejar rendido el silencio

a los pies de los ausentes...
Sería tan sencillo

ver con claridad las cosas,
pero quién puede

morderse un nudillo

sin aullar lamentos

por lo que estamos perdiendo...
Intento introducirme

en los zapatos cada día

con igual nivel de esperanza
pero que terrible resulta

encontrar tantas razones

para reventar de odio...
Es duro que cada vez

importe menos separar

lo que se quiere hacer

de lo que se debe,

más aún cuando pesa mucho

voltear el calendario

sin soportar una sinrazón

al acabar la semana.
Afortunadamente ahora

conozco algunas cosas

sobre lo que nunca

me enseñaron

y espero que eso no sea

nunca suficiente porque

jamás debería serlo

mientras sigamos vivos.
Tal vez el próximo signo

de inteligencia está

en aprender a tumbarse al sol

mientras el calor realiza

su trabajo en nuestros poros

y el mar reclama

la respectiva cuota de atención

que nos limpie de la carga

propia de los tiempos oscuros.