domingo, 14 de agosto de 2011

UTOPÍA



Mi Patria se llama Utopía,
está situada estratégicamente
en el corazón de los hombres
y todos son bien recibidos
vengan de donde vengan,
ya sea en un viaje organizado
o en una desvencijada patera.
En Utopía no se exigen papeles,
sólo sueños imposibles de cumplir
en cualquier otro lugar del mundo,
o en los sistemas político-económicos
ideados realmente para la opresión,
más que para liberar al pueblo.
En Utopía no hay leyes de extradición,
los jueces han de licenciarse
en el más común de los sentidos
y valoramos a los que se equivocan
porque serán un pozo de sabiduría.
En Utopía no existen los bancos, el FMI,
las multinacionales o las hipotecas,
todo es tan simple como dar
en igual medida en que se recibe.
En Utopía nadie se siente solo
porque hemos aprendido
a tenernos a nosotros mismos,
de la misma manera que a amar
como si nos fuera la vida en ello.

No hay comentarios: