Ese otro que
también me habita,
acaso propietario,
invasor quizás
o exiliado en este
cuerpo que a veces
siento ajeno,
ese otro a quien
temo e ignoro,
felino o ángel,
ese otro que está
solo siempre
que estoy solo,
ave o demonio,
esa sombra de piedra
que ha crecido
en mi adentro
y en mi afuera,
eco o palabra,
esa voz que responde
cuando me preguntan algo,
el dueño de mi embrollo,
el pesimista
y el melancólico
y el iracundo,
ese otro,
también existe
y puede que sea
mi verdadero yo.
2 comentarios:
Poema redondo que a todos, creo, nos ronda.
Felicitación 👏👏👏
Gracias
Publicar un comentario