sábado, 31 de octubre de 2015

MUJER Y LIBRE







No hay otro rumbo
si te roban lo más valioso.
El podrá justificarlo como quiera,
podrá argumentar
que quizá algún día cambie...
Pero es tu momento de despertar
no tratar de posponer durante días
el ritual de mirarte a los ojos
con la satisfacción
de haber hecho lo que debías.
No le des la satisfacción
de dedicarte a tareas
como deshojar margaritas
ingerir a solas alimentos
con la dificultad de una lisiada
con las manos contraídas,
rígidas de tanto llorar por los poros...
Y permitir que se agigante
esa gran nausea bloqueando
tu garganta ennegrecida.
No se lo merece
por cómo te ha tratado
y tienes por delante una vida
para militar en el bando
de los que aman, sueñan, confían...
Has de ser la belleza,
la respiración pausada,
el alma serena y el corazón caliente.
Has de levantar la mirada
con el firme propósito de ser mirada.
Has de deshacerte de la impía terquedad
del recuerdo como un pez
asfixiándose en tus manos.
Se trata del acabamiento
como convulsión revitalizadora
y cada segundo que pase
es un centímetro más en pos de la meta
de que casi ni te duela
y conviertas a ese hombre
que te ha maltratado en un residuo.
Y volverás a reír
con los que de verdad te quieren,
a ser libre para sentir
el orgullo de ser mujer y soberana.




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