lunes, 23 de julio de 2012

RUMBO


El monstruo puede estar a tu lado,
transformado en el ser
que dice adorarte
pero que al menor descuido
estalla, rompe y brama
sin medida...
El fuego que escupe por su boca
es el mejor indicio
de la hoguera que arde
en su alma y le impele
a dañar todo lo que toca.
Llegados a ese punto de maldad,
actúa como si la vida
te lo hubiese puesto ahí
para que superes el miedo,
y aprendas a gobernar tu nave
en las peores condiciones posibles
porque si superas esa tormenta
serás capaz de cualquier cosa.
Tal vez las pesadillas
de los niños sean
una reminiscencia y un anticipo:
Reminiscencia del pavor
a ser devorados
por animales salvajes
en la noche de los tiempos.
O anticipo de las bestias
con las que habremos
de convivir algún día.
Navegar en el caos
que desatan los monstruos
es una forma de aprendizaje,
pero has de ser osada,
tomar el timón y soltar las velas
para fijar tu propio rumbo
sin nadie que lo mediatice…


No hay comentarios: