jueves, 21 de junio de 2012

QUÉDATE



Quédate junto a la orilla
de este descamisado silencio
que vive al lado mismo del mar,
de esta ignorancia ignota
que cuanto más sabe menos entiende.
Quédate y no me vacíes de estrellas,
que no deseo que los vientos
 me arrastren en su huida.

Besa en cada una de tus llegadas
la comisura de mis presagios,
pero no te vayas nunca.

No me obligues a decir adiós
a todo lo que soñé en estos días
de compañía conmovedora,
ni a los barcos que abrieron
sus velas en nuestras pieles...
Porque no podría soportar
vivir del eco de las imágenes
que me acompañarían permanentemente
en la abatida memoria.

Por nada del mundo quiero pensar
en la posibilidad de despedirme
de tu cuello de almendras
y a esos ventrículos saturados de miel
que en el corazón guardas.

Quédate en las hermosas horas
donde en mis pestañas restallas,
en la luz de los horizontes marinos
cuando nos tumbamos en la arena
y en las buenas noches que nos damos
cuando el cansancio del día llega.

1 comentario:

Antoniatenea dijo...

Sólo un poeta dice cosas como cuello de almendras" ....o "ni a los barcos que abrieronsus velas en nuestras pieles" o" no me vacíes de estrellas" y han de existir para que podamos contemplar otro espacio, donde el sentido de las palabras se ha vuelto loco pero coherente .. eso me encanta. Precioso, Paco!!