miércoles, 29 de febrero de 2012

PARA TI, INSPIRACIÓN


Hemos concretado un pacto
consecuente porque has aparecido,
y desde que lo hiciste
cualquier ruido y silencio
se reconvierte en ternura
concretada desde tu imagen
para reproducirla en palabras,
la mañana y la tarde esperando
el momento concebido
con el fin de disfrutarte.
Te confieso que es un gran día
porque desde hoy
voy a escribir en el convencimiento
de que nacemos de nuevo
siendo tú la protagonista
de lo que escriba
y yo formando parte de lo eres,
una conjunción veraz
de sentimientos verdaderos
marcados a fuego y sabiendo
que siempre serás iluminación
plasmada en mil y un poemas:
Espléndido amanecer
para mirarte pura, limpia y soberana,
rocío de los jardines
y espejo que refleja ansias voraces,
ambiciones de karma donde guarecerse,
pasiones y latidos donde el fuego
se queme de tal manera
que nunca se haga cenizas.
Te escribiré desde una cercanía
que no tiene medida
y serás algo verdadero, veneno y verbo,
también diosa real como lo que siento...
Y compañera única entre todas,
amiga cómplice punzante en el alma,
luz furiosa coronada
por el poder que me posee,
penitencia sugestiva a más no poder,
sensualidad poderosa
que se vive constante en la presencia
sea cual sea la distancia...
Seré un poeta convertido en hombre
que se rinde a tus encantos,
un rebelde que te considera única
y pone a los pies de tu piel
su libertad como estandarte
y que alza con orgullo
el sentir de tus latidos
para abrigarlos como su patria y su bandera.
Y prometo ser un delincuente
siempre dispuesto a estar
en el límite de lo incorrecto,
el campo fértil que necesita tu desvarío
para concretarse en la realidad
de ser verdad y disfrutarlo.
Seré el que se crea inmortal
cuando te acerques,
un delirio constante con nocturnidad y alevosía
para las fantasías que nos acechen,
que también intentará llevarte
a las cotas más altas de la ternura
para que desde allí cumplamos
con nuestro destino, tú de musa
y yo de autor a ti rendido.
Harté lo posible para cultivar tu sonrisa
y que las lágrimas no broten
a no ser que sean de felicidad pura y dura.
Los días estarán llenos de poemas
bordando sus minutos
y la rutina será una espiral de dichas
porque todo estará envuelto
en el deleite de los sentires
y estarás ahí para conformarlo
y confirmarlo cuando en algún momento
de providencia de amor te llame,
porque sin ti simplemente ya no lo sería,
al menos en un poema que de amor trate.

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