PREDICCIONES

Es normal que estén preocupados por este año que se nos avecina. Para no hacerlo con la que nos está cayendo... Por eso, este cronista haciendo gala de una proverbial capacidad de predicción, ha decidido transmitirles doce realidades para los próximos doce meses con el fin de que les cojan prevenidos

Una. En 2012, España seguirá en cabeza. Estaremos en boca de todos a causa del paro, la corrupción política-económica y el despilfarro en cuestiones que nadie con dos dedos de frente puede entender cuando se le pide a los españoles austeridad y se les vacían los bolsillos.

Dos. En 2012 a los españoles ya no les robará un desconocido, sino gente con nombre y apellidos a los que se les ha dado un rotundo mensaje y que han sido elegidos en una lista de más de cien imputados. El mensaje ha sido claro: A los españoles se les puede robar pero les gusta saber quién lo hace. Eso es lo que se entiende ahora por democracia, elegir a tus ladrones.

Tres. En 2012, el Rey seguirá hablando de vergüenza, y no precisamente ajena. No hace falta decir la razón, pero la bola de nieve que su yerno ha arrojado seguirá creciendo y afectará seriamente la imagen de la monarquía... ¿Aumentará este problemilla las filas del sentir republicano? Lo dudo, aquí lo soportamos todo.

Cuatro. En 2012 seguirá creciendo la leyenda de Francisco Camps, y su condena en el juicio por corrupción lo convertirá en héroe en su comunidad, donde habrán manifestaciones populares en las calles para demostrarle al susodicho el cariño y el apoyo que tanto va a necesitar. En consecuencia, en Valencia se agravarán los síntomas de deterioro moral en que se ha visto sumida en los últimos años. Por cierto, que Castellón seguirá teniendo un aeropuerto para las personas como monumento al surrealismo...

Cinco. En 2012, la Iglesia seguirá empeñada en traer el reino de los cielos a España. Lástima que ese empeño no sea mínimamente consecuente y siga envuelto en una idea excluyente y antidiluviana de la sociedad que condena a millones de personas a la frustración, la enfermedad y la muerte.

Seis. En 2012 la policía pondrá a este país a correr, calle arriba, plaza abajo, que es el método más eficaz para que parados, indignados y demás ralea se ponga en un perfecto estado de forma física: Mens sana in corpore sano, esa será la consigna.

Siete. En 2012 los españoles dejarán de preocuparse por problemas como el trabajo o la vivienda. Les preocuparán cuestiones como el mini trabajo y la mini vivienda, que al ser más pequeñitos es una carga más sencilla de llevar.

Ocho. En 2012 se darán pasos definitivos para acabar con la contrariedad que suponen las insoportables listas de espera de la Sanidad Pública. Primero se privatizarán los hospitales y luego muchos médicos se verán en la necesidad de emigrar. Así los enfermos se morirán más fácilmente y no serán una carga económica tan importante. Total, en cuanto se implante el copago ni siquiera tendrían dinero para pagarse los medicamentos...

Nueve. En 2012 se declarará en España el Año de las Restas. Nadie sumará nada excepto la Iglesia, a la que nadie se atreve a restarle nada.

Diez. En 2012 se le concederá al pueblo español el premio Príncipe de Asturias a la Paz y la Concordia por ayudar a un montón de directivos de cajas de ahorros a hacerse multimillonarios. Y sin olvidar también su contribución decisiva para que algunos banqueros se hicieran más multimillonarios aún de lo que eran. La generosidad puede no tener límites...

Once. En 2012 definitivamente se les hará entrega oficial de la idea de una Europa Unida a las multinacionales y a sus tecnócratas para que la administren con su proverbial sabiduría. Así habrá un regalo menos del que ocuparse cuando llegue la próxima navidad.

Y doce. En 2012, los españoles sufrirán las consecuencias de las decisiones que tome el nuevo gobierno español, designado por nuestro ínclito presidente, el desaparecido en combate, D. Mariano Rajoy. He aquí algunas características del curriculum que atesoran:

• Quién mejor para sacarnos de la crisis desde el ministerio de economía que el máximo responsable en España de la máxima responsable de la crisis económica global, Lehman Brothers.

• Quién mejor para dirigir el ministerio de Defensa que Pedro Morenés, consejero de una empresa que fabrica bombas de racimo, prohibidas en España por su uso contra civiles.

• Quién mejor para el ministerio de medio ambiente que Miguel Arias Cañete, un tipo que presume de poseer siete coches y miles de euros invertidos en acciones de petroleras.

• Quién mejor para Hacienda que Cristóbal Montoro propietario de una firma dedicada a asesorar a grandes empresas para ayudarles a pagar menos impuestos

• Quién mejor para el ministerio de ciencia… vaya, menudo despiste: si ya no hay ministerio de ciencia, ni tampoco de cultura...

Que el diablo nos coja confesados.