viernes, 23 de diciembre de 2011

SOBRAN RAZONES



Sobran razones
para alabar
los signos que desprende
la desnudez exacta
de una piel femenina…
Cuando en ella
se manifiestan
huellas de humedad,
brotan aromas
como de tierra
recién empapada
con caricias de lluvia.
Nada es más bello
que respirar la voluntad
atesorada en la mujer
mientras permite
que alguien se solace
en la pulcritud de su ombligo
trotando escalofríos
a lo largo y ancho
del vientre liberado.
Nada más hermoso
que escalar
entre avalanchas
el reto de sus senos
y catar el descaro
que en la desnudez luce
para ser apetecida
y rendirle
un homenaje a la pasión.
Nada más sublime
que el lugar donde desemboca
la lengua con que susurra
generosos dones
y la esperanza de tenerla
de manera
fugaz pero intensa.
Nada más extraordinario
que contemplar sus ojos
transformados en luz
en la escarcha del invierno
pues con esa turbación
de signos descifrables
las noches son un cúmulo
de lúcidas emociones.
Nada más excelso
que enredarse en sus cabellos
agitados cual palmeras
ondulantes frente al viento
y extasiarse admirando
entre asombros
una obra tan perfecta
de evolución y goce.

2 comentarios:

Montserrat dijo...

BUF! AMIGO! BESTIAL! ME HA COGIDO UN ESCALOFRÍO POR EL CUERPO...

Pacogor dijo...

De eso precisamente se trataba: De provocar escalofríos...