martes, 15 de noviembre de 2011

TE ESCRIBO UN POEMA



Te escribo
y soy yo el que se muestra
a la luz de tu mirada:
Al escribirte me describo,
desnudo para ti las palabras 
con la ilusión en la magia
de amarnos cuando me leas.
Porque al leerme me tocas
y mis letras te traducen
el lenguaje de la piel
y las sílabas del cuerpo.
De esta manera
pretendo que nos acariciemos
y que los versos sean
el elemento en la distancia
mediante el cual
nos besamos y palpamos.
Soy yo el que te ama,
no el poema,
no son los versos:
es el sortilegio de mis manos
que trasladan su impaciencia
al caos de otro cuerpo
dolorosamente hermoso
y en cada sílaba leída
convierte en menos virgen
la poesía del alma.
Te escribo
porque eres lo que tengo
desde que perdí la tristeza
y quiero darte
la mitad de mi alegría
para que puedas restregarla
por cada poro,
en cada recodo ignoto
y dejar que te penetre
hasta la raíz misma
de tus ansias y fantasías.
Es un proceso
redactado con la urgencia
de otros poros,
que seducidos por tu imagen
los graba en los sentidos
para luego de escribirlos,
te lleguen y te llenen.
Pero soy yo,
son mi sed y mi hambre
condensados en un poema.
Por eso te escribo.
Por eso necesito que me leas
para que me ames.

3 comentarios:

Montserrat dijo...

Tendrías que dedicarte a escribir... siempre. Muy HERMOSO.

Pacogor dijo...

En eso estamos, en eso estamos...

Antoniatenea dijo...

Soy yo el que te ama,
no el poema,
no son los versos:
es el sortilegio de mis manos
que trasladan su impaciencia
al caos de otro cuerpo.....................es precioso ese trozo especialmente. intenso y hermoso lo que dices!