martes, 14 de junio de 2011

BANCO DE MADERA



Este banco de madera
es muy posible
que no recuerde
lo que sucedió al principio,
pero un día decidió
sentarse bajo el árbol
al igual que yo mismo
para descansar del mundo,
mientras amortiguaba
los rigores del verano.
Los días son largos
en ésta época del año
y hay tiempo de sobra
para la pausa del alma
y la reflexión en los ojos.
Un banco de madera,
la sombra acogedora
de una arboleda
y nubes del perfume
que transpiran las flores,
se han sentado juntos
y me hacen compañía
para descansar al margen
de las prisas y el estío.

1 comentario:

Montserrat dijo...

Me encanta!!!!!!!!!!