miércoles, 18 de mayo de 2011

SONRISA



El espacio de tu sonrisa
puede quebrar distancias,
desempolvar la tristeza de los ojos,
electrizar el rictus más salvaje
y quebrar la más dura piedra
en que pretendan convertirse
los corazones aristados.
Cuando la desperdicias
cometes crímenes de ánimo,
infracciones de confianza,
seriedades casi delincuentes
que el mundo no merece
porque tu destino
no es calcinarte en los problemas
sino reservar un guiño cómplice
para las horas que no tengan remedio.
Contigo ha de ser así de sencillo,
no sirven ciertas pequeñeces,
y consigues acreditaciones
con vía libre a la dicha necesaria
que puedes otorgar tan generosa
con sólo sonreír cuando amanece,
regándonos en los ojos la alegría
para que puedan enloquecer
las campanas del alma
y gritar en el estruendo
hermosamente nuevo de la luz.

2 comentarios:

Montserrat dijo...

Lo que puede dar de sí una sonrisa...

Pacogor dijo...

Cosas insospechadas, eso puedo asegurarlo.