martes, 19 de abril de 2011

TODO LO QUE TENGO



Y no amanece...
Sigo siendo invisible
pues me resguardan
las sombras de la noche.
Salgo al balcón
y contemplo el ámbito
por dónde en unos minutos
deambularán los sometidos
a las mentiras
y los fuegos de artificio
del sistema en que vivo.
La fórmula funciona
con la exacta precisión
de un mecanismo de relojería,
en realidad siempre ha sido así:
unos pocos ganan
y los demás perderemos
también hoy la partida.
Va siendo hora de darle
un enfoque diferente
y buscar nuevas estrategias
para conquistar Kamchatka.
Rápido, que a las nueve
empiezo a trabajar,
me quedo sin tiempo
y todo lo que tengo es mi alma
deseando algo más
de lo que nos permiten...

1 comentario:

Montserrat. dijo...

Si,si... tienes toda la razón, amigo.