RESPUESTAS

Llevas en tu boca
un montón de respuestas
a mis interrogantes sobre los axiomas
de la vida y del amor.
Entre tu lengua y la mía
hay un valor que no se extingue
con el paso de los tiempos
o el poder del silencio.
Tu espalda me reconoce
y parece retener el ansia
de sentir mis dedos recordando
las perspectivas de tu anatomía.
No importan las frialdades
porque contigo recupero
el calor de cada día
y una brisa cálida
impregnada con tu nombre
recapacita siempre en mis oídos
cuando necesito escuchar al sol
dándole lucidez al aire que respiro.
Llevas contigo el poder
de rehacer el mundo,
fabricando versos de un futuro
donde tu cuerpo seguirá
emocionando al mío.
En tu identidad estalla la primavera,
adormeciendo la belleza
de todos los paisajes
para que yo te reciba como un río
desbordado de emociones
por todas sus costuras.