jueves, 23 de abril de 2009

MI REGALO EN EL DÍA DEL LIBRO

Mi regalo por el día del libro, es este poema de José Agustín Goytisolo, escrito tras el nacimiento de su hija. El poeta, nacido en Barcelona el 13 de abril de 1928, vio brutalmente sacudida su infancia por la muerte de su madre madre -Julia Gay- víctima de un bombardeo franquista sobre la ciudad en 1938. El hecho dramático afectó a todos los hijos, pero especialmente a José Agustín, que puso a su hija el nombre de la madre perdida, y que en uno de sus más célebres y hermosos poemas (musicado e interpretado por Paco Ibáñez), Palabras para Julia, une voluntariamente en amor y deseo, a las dos mujeres. Siempre me ha emocionado profundamente, y ese sentimiento no deja de crecer con el paso de los años.


PALABRAS PARA JULIA
Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.

Hija mía, es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante el muro ciego.

Te sentirás acorralada,
te sentirás perdida o sola,
tal vez querrás no haber nacido.

Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto,
que es un asunto desgraciado.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor.

Un hombre solo, una mujer
así tomados, de uno en uno
son como polvo, no son nada.

Pero yo cuando te hablo a ti,
cuando te escribo estas palabras
pienso también en otra gente.

Tu destino está en los demás,
tu futuro es tu propia vida,
tu dignidad es la de todos.

Otros esperan que resistas,
que les ayude tu alegría,
tu canción entre sus canciones.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, como ahora pienso.

Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.

La vida es bella, tú verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.

Por lo demás no hay elección,
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio.

Perdóname no sé decirte
nada más, pero tú comprende
que yo aún estoy en el camino.

Y siempre, siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí,
pensando en ti como ahora pienso.




2 comentarios:

Foxy Lady dijo...

Y he aquí a una que le gusta mucho ese poema del que sólo conocía una parte.
Gracias por este regalo.

Pacogor dijo...

También ha sido de siempre uno de mis poemas preferidos. Y más aún cuando descubrí la historia que tenía detrás...