viernes, 9 de enero de 2009

VEN CONMIGO

Ven, que tus brazos se abran
a mi abrazo de amigo.
Acompáñame un instante,
siéntate, cuenta desdichas,
ansias, ilusiones...
y, de ese mirar hundido en el tiempo,
veremos crecer el cariño
que nos profesamos.
Por eso te llamo amiga,
y en su significado está
que cuando la soledad te invada,
mires atrás y apenas sientas
la presencia dolorosa de tus hombros,
no estarás sola.
Ven hasta mi tarde,
y estando conmigo
no hallarás muerta la esperanza
de tu mirar sin luz.
Celebra la alegría de este nexo,
vibra en nuestro vínculo,
canta en mi fidelidad
el grito de todos los gritos,
en el ansia de la confianza compartida.
Ven, que el cariño
que habita en nuestros corazones
nos transborda el alma,
como la fuerza impulsiva del mar.
Compañera de esencia:
soy ese que te quiere
y siempre tendrás a tu lado.
Por eso toma mi mano,
dame tu mano,
y camina junto a mi silencio
el espacio que ha sido liberado
de nuestros miedos.

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