viernes, 1 de febrero de 2008

DRÍADES

Bellas y ancestrales
criaturas del bosque.
Hermosos espíritus
que matizan de magia
y armonía la floresta.
Hijas del Sol y La Tierra,
duendes de color,
orgánico perfume
de esencias naturales,
sugerencias atávicas
y frondosas raíces.
Luminarias presencias,
impulsos de serenidad
que mecen su encanto
conjurando equilibrios.
Susurros de amores
que solo podremos ver
con los ojos de la ilusión:
En esta ceremonia
les invoco una audiencia
para ahuyentar la soledad,
llenar de fiesta el corazón
y colaborar entre todos
para crear una conciencia
de interés y respeto
por la madre naturaleza.

1 comentario:

CRO dijo...

Mi foto esta esperando ocupar el lugar de esa que tienes puesta en driades...
besos. cecy